jueves, 21 de octubre de 2010

Simulacro 4 - I. Primavera (revisión otoño 2010)

Es la primavera
del amor lo más adverso.
No cede a la fuerza
¡Más aún!
Rauda desprende un aroma
que embota la mente.

No hay más impulso en los pasos
ni pensar 
con ese sudor frío en la frente.

Resiste.



Es mejor bailar que amar en estas fechas.
Mejor que mil pies dancen
asidos a la música
¡Vértigo!
Aún más lejos caen las zancadas
si juegan libres, sin tempo.

Flotar por la telaraña densa
olor:
levantar la mirada
henchir el pecho
no hay más que un olor
en las hebras de espejo.
Tremendos saltos 
son de hilo en hilo.
Ricos matices rezuman espesos.

Desiste.

¿Tiene reflejo el olor?
To do lo be llo es curvo
                 no recto

Simulacro 4 - II. Simulacro Nietzsche (revisión otoño 2010)

El hombre no distingue un tablón de madera de un tronco,
todo le parece lo mismo: rígido, muerto
¡Que aprenda de acción el hombre!
Muchos hay que no saben florecer
y descargar en el mundo su esencia.
Vacíos, débiles
inútiles cuerdas intangibles
para mis manos tañedoras.

No son peso para lo que yo llamo soportar
mas su pesadez engorda
y engorda su fragilidad.
¡Por ahí van arrastrando los pies!
Más fuerte es el que más carga, carga y descarga.
Pero antes debe conocer cómo sostener sus huesos.
Dicen que no pueden ni con su alma
pero yo no cargo con algo inútil
no soy de esos.

Simulacro 4 - III. Verano (revisión otoño 2010)

No es del deseo la fuerza la primavera
sino viceversa
¡No se deja!
Qué hay mejor que amar a la vida
esa es la fuerza.
Que el trigo ondee, ondule libre con el vendaval, lozano
eso es un deseo.
Más vida han sembrado huracanes que cierzos.

La fuerza es incontestable pues
no es palabra, no es verborrea, no es locución sino 
olfato, timbre, carne en movimiento.
El acto genera reacción
donde tumba a la piedra el viento.
Silbido ocupa al silencio
sólido ejemplo.

El deseo es incontenible
es la meta.
Contener la fuerza que lo empuja
por miedo
es poner la mano en el fuego;
una tontería porque
abrasa el árbol 
el tacto
de sus hijos las yemas.

Más rastrojos que las quemaduras deja el resentimiento.
Toda reacción sin motivo revierte arrepentimiento.
-
-
El deseo ya no resiste pero 
como acostarse en la hierba fresca:

te acomodas mece 
te revuelves corta
te duermes
-
mueres
-
descompone
humifica
invier te

nueva simiente

se va haciendo flexible
más viva.
El cascarón parece rígido
inerte.
Qué extraño mundo donde
una simple pared de huevo
puede separar en un puño a un feto
de aire, gallina, pradera, montañas,
planeta, galaxia, universo.

¡Romper esa dura coraza!
El límite en lo que no contiene.
Continente que no tendrá costas
para que todo el océano pueda abarcar.
-
-
Brusco fue/es/será el primer empujón.
"Antes de levantarte
debes aprender a caer."

¡Que golpeen fuerte los
huesos contra las rocas!

¡Olas y barcas se alcen!

¡Se alzan granates y astillas!

Serán los restos atardecer
contraste
cadencia interminable
de ondas catabolismo
culminando
en dunas de sal y arena
inflada la superficie y curvada

armónicos de vasta profundidad.
-
-
El deseo a la deriva
exhausto
a la deriva en bemol rema
reflejos dorados
e inmune al azul veneno

proyecta el río que remontar,
de caudal a estrechar y cuyo
discurso de intestino ofrece
más que exige
un ecosistema donde trocar.

Reunión arbórea bajo las estrellas
ojos que descansan del reciente eco diurno
o bien del remoto pasado despiertan.

Sisean las hojas, bailan
libres de sus sombras
en la fresca roca
al rumor nocturno
que remolonea colina abajo
muriendo en el embudo
de la ciudad que se
para
jardín primavera de noche estival.

Algún loco tararea
en la otra orilla y al revés 
                           bajo el río.
La soledad... es una utopía.
¡No existe!
Admiración, aspiración, inspirado deseo
su mismo castigo.
No se requiere pensar en la ausencia
se vive.
¿No te parece una penosa ironía?

Simulacro 4 - IV. Realidad inadecuada (revisión otoño 2010)

Innumerables astros adolescentes
otean desde minúscula alcoba
rodeados de vasto negror.
Destierro, condena
escondrijo, huida
por no soportar sus esperpentos.

Comprender el carbono, el acero, el silicio
anhelan mecanismos de hidrógeno y helio
pero no hay dios que mire
por el mayor de los agujeros.

Anciana luz rozando la piel
erizando el vello
donde se riza el tiempo.
Joven mensaje en retorno
para dioses muertos.

Remitámonos a la ciencia si es preciso
declarándonos a sus modelos
que hoy en día son los mejores
aún pudiendo resultar inciertos
como lo son el resto.

Supone este texto
electricidad, semiconductores, señales
gigabytes
estructuras digitales, grafos, autómatas
gramática, verbo y complementos, letras
teclas
(de un extraño sagitario)
yemas uñas falanges dientes dedos
energía de Gibbs y ATP
músculo, redes, dendritas
tiempo
y el moco membranoso digitado
andamiado
que lo escribe en unísona sociedad
persona

dice que

más oscuro y perpétuo
deseo de estar vivo no surge
sino de comprender más y
más lo inhumano que es todo

y los impulsos de no pertenecer
a la especie, a cualquier cosa
menos a esta
procede de humanas triangulaciones y

lo mal que escalamos
en parajes de murciélagos.